La Piscina

Discretamente situada a unos 25 m del patio principal del hotel encontramos una apartada zona de descanso, en el lugar que antes ocupaban tres pequeñas casas. Cuenta con una imponente borj (atalaya) restaurada en los muros de defensa de 7 m de altura, a cuyos pies hay una piscina climatizada de 10 x 5 m con una profundidad que va de 1 a 2 m. Uno de los laterales ofrece un solarium orientado al sur con tumbonas y sombrillas.

Enfrente de la piscina y desde el solarium, hay un edificio nuevo que alberga el spa en la primera planta y, en la planta baja, un pequeño pool-bar donde se sirven bebidas, incluida una amplia variedad de cócteles y distintas opciones sin alcohol. Aquí también pueden tomarse aperitivos y comidas ligeras preparadas en la cocina del hotel. Junto al bar están los vestuarios y las duchas para los usuarios de la piscina, donde se les suministran las toallas.

RECUERDE QUE LA PISCINA PERMANECERA CERRADA DESDE 22 AL 24 ENERO POR MOTIVOS DE MANTENIMIENTO

El Spa del Les Borjs de la Kasbah

Situado en la tranquila zona de ocio, a unos 25 metros del patio principal del hotel, nuestro spa, L'Arganier, incluye un clásico baño turco abovedado revestido de mármol y una sauna separada, además de dos salas de tratamiento y un área de descanso, todos con celosías (menze) típicas de la zona con vistas a la piscina y al solárium.

 

Una sesión de baño turco en un baño de vapor tradicional consiste en un baño, numerosos chorros de agua caliente y concluye con un cubo de agua fría que le deja lleno de energía. A continuación, podrá disfrutar de un "gommage" (exfoliación corporal utilizando el típico jabón negro "beldi" a base de olivas y hojas de eucalipto), seguido de un delicado masaje de espalda, cuello y hombros de las manos de un terapeuta del spa para ayudarle a liberar su tensión muscular.

Durante las sesiones de baño turco reservadas con antelación podrá ponerse la ropa con la que se siente más cómodo/a, idealmente un bañador o, en su defecto, ropa interior. En el spa podrá encontrar cabinas para cambiarse, taquillas para dejar su ropa y efectos personales, batas de baño, sandalias y toallas. Le aconsejamos que después de su tratamiento se tome 15 minutos de descanso para relajarse y recuperarse, tomando un té de menta antes de volver al mundo exterior.

Además de las sesiones de baño turco, nuestro spa ofrece una serie de masajes vigorizantes y relajantes que, en su mayoría, proceden de una larga tradición y un amplio conocimiento de los beneficiosos de los efectos de las terapias herbales. Para cada sesión, nuestros terapeutas, todos ellos cualificados y con experiencia, seleccionan cuidadosamente los aceites vegetales que mejor se adapten a su tipo de piel y a sus necesidades. Nuestros masajes actúan como estimulantes y a la vez generan una sensación de relajación total.